lunes, 7 de septiembre de 2015

El conocimiento otorga poder, la ignorancia incertidumbre.

Y después de un año continua la búsqueda de los normalistas desaparecidos. El día e ayer escuché la conferencia de prensa de la hoy Procuradora Aracely Gómez y la de los padres de los muchachos de Guerrero.

No estoy de acuerdo con que se cometan este tipo de injusticias en mi país, pero para poder opinar hay que investigar realmente que es lo que pasa. Muchos juzgan el ¿Por qué no se hizo nada desde un principio, por qué no entro PGR o la Milicia? Para poder opinar sobre este asunto es necesario conocer el contexto de procuración de justicia, los procedimientos penales y el sistema de legislación; existe el fuero común y el fuero federal, para que un caso llegue a este último, primero debe pasar por el fuero común (homicidios, robo, violación, etc.), el catálogo de los delitos de fuero Federal son más especializados; si queremos cambiar el sistema o cualquier cosa, primero tenemos que informarnos.

Mi pensamiento es que no son solo 43, son miles de personas desaparecidas, acaso ¿Alguien esta buscando a las personas que desaparecen cada semana en autobuses que viajan por Tamaulipas? ¿Alguien habla de los indocumentados que son agredidos por los coyotes? No solo es la policía y la milicia, somos todos.

Los medios de comunicación juegan un rol muy importante en lo que llega a nosotros, la manera en que es manipulada la información (qué la mayoría de las personas tenemos conciencia de esto) es la manera que la procesamos para nuestra vida. Es muy lamentable que la sociedad en general no crea en el gobierno, que ya no crea en lo que dicen, todo es puesto en duda; la realidad es que el 99% de las personas que han trabajado (en especial) la investigación de los normalistas son empleados de un sistema corrupto que esta podrido en sus altas esferas pero, que triste es que el trabajo de los que andan en campo que se han especializado y tienen los conocimientos de dictaminar, sea refutado por la culpa de unos cuantos que se han dedicado a crear una imagen de corrupción, cuando la mayoría de las personas que trabajan, no lo son.

¡Qué tristeza! Es que nuestra fe y esperanza sean comidos por un monstruo corrupto y que dejemos que lo hagan, que desaparezca una persona sin dejar rastro, que involucremos grupos de control donde no estuvieron solo porque ya no confiamos en nadie. ¿Dónde están estos muchachos? pero ¿Quiénes son las víctimas sin nombre que han encontrado en las fosas?

Grito lo más alto que puedo ¡NO SON 43!

Yo me doy el permiso de escribir porque tengo el conocimiento y la información para levantar la voz, antes de marchas, juzgar y exigir, tenemos que tener las herramientas, más que necesarias, para exigir justicia y un mejor país, hay que educarnos en lo social y lo cívico.

No hay que creer en todo lo que se escribe, se publica y trasmite de manera viral por las redes sociales, hay que investigar; el conocimiento otorga poder, la ignorancia incertidumbre.